Un verdadero mazazo es lo que sintieron los trabajadores del oro y la plata agrupados en el Sindicato de Trabajadores El Peñón. Esto tras la última oferta presentada por Minera Meridian, la empresa mandante de la faena ubicada en la Región de Antofagasta, que no cumplió con las expectativas de las y los trabajadores, quienes, con un 99,3% de las votaciones, decidieron irse a huelga en caso de no prosperar un mejor acuerdo.
Esta búsqueda de acuerdo está trabada desde que el sindicato presentó su proyecto de contrato colectivo a fines de mayo, recibiendo una contrapropuesta que mantuvo los pisos alcanzados en la última negociación y no otorgó lo demandado por las y los trabajadores: un aumento tanto en los sueldos base y en los porcentajes de los beneficios como también en el bono de término de conflicto. Frente a esto, los 881 trabajadores asociados a la gremial decidieron paralizar sus actividades en caso de que no se mejore la propuesta en el proceso de mediación obligatoria.
Así, desde este 30 de julio, la empresa y el sindicato se sentarán a dialogar para intentar alcanzar un acuerdo. Si durante estos cincos días de mediación obligatoria no hay humo blanco, el próximo martes 6 de agosto los trabajadores de Minera Meridian comenzarán su huelga legal, justo en un periodo en el que el valor de la onza de oro y plata se encuentran en su máximo histórico.
No se cumplen las expectativas obreras
Desde hace 14 años, las negociaciones han sido un tema complejo en El Peñon debido a la existencia de dos herramientas de negociación diferentes. La Dirección del Trabajo (DT) emitió los dictámenes ORD. 2858/79 y ORD. N°1271, indicando que los trabajadores deben optar por uno de estos contratos colectivos, órdenes que la empresa ha ignorado.
Sobre este tema, Mario Ramírez, presidente del Sindicato de Trabajadores El Peñón, indica que la compañía no ha cumplido con lo mandatado por la DT respecto a este último punto: “La empresa no respondió a un proyecto unificado, con valores únicos por cada beneficio que se tiene, sino que con montos distintos, discriminando entre trabajadores dentro un mismo sindicato”.
Según indican los trabajadores, esta es la primera vez en 17 años de lucha sindical que la empresa entrega una propuesta final que no logra cumplir con las necesidades obreras. “La respuesta de última oferta entregada fue un verdadero mazazo, diciendo que deberíamos darnos con una piedra en el pecho ya que estamos sobre pagados por los IPC acumulados”, indica Ramírez.
La huelga como derecho
Además de no cumplir con las expectativas en términos económicos, el presidente del sindicato señala que el hecho de que se han obviado las instrucciones mandatadas a través de la ORD. N°1271 han generado escozor en entre las y los tranbajadores: “Esta respuesta dual es discriminatoria, además de entregar mensajes subliminales maliciosos y que no se condicen con el espíritu de unidad, equidad y justicia de nuestra organización sindical”.
Finalmente, Mario Ramírez advierte que de no llegar a un acuerdo, usarán las herramientas legales que están a su alcance. “Hemos golpeando una y otra vez las puertas de la DT y de la inspección regional, buscando las respuestas necesarias para enfrentar a nuestro empleador con argumentos fuertes y la ley por delante, pero aún nos queda la instancia de la huelga como derecho que tiene todo trabajador”, finaliza.